lunes, 18 de julio de 2011

El jardín

En el jardín hay un cerezo dormido, pero parece muerto. Este otoño comenzó a sentirse apático, y la dejadez se apoderó de su espíritu. La vida cansada de verle triste y desastrado, decidió que lo mejor sería que se tomara un tiempo para reflexionar sobre su relación, y se marchó de vacaciones dejándole en un estado de abatimiento que hizo que se fuera consumiendo poco a poco hasta que acabó por convertirse en lo que es ahora: el aletargado esqueleto de un cerezo, una osamenta de madera clavada al suelo que sólo espera que regrese la vida...

No hay comentarios: