Y cuando todo pase
y las aguas recuperen su cauce
y la felicidad se instale
y las sombras vuelvan a ser del día
y el frío sea de nuevo compartido
y se marchen las nubes
y la música recupere su armonía
y octubre tiña de rojo el cielo
y la paciencia muera de esperar
y reconstruya los pedazos de mi existencia.
Quizás sea demasiado tarde
y ya no pueda quererte.
No hay comentarios:
Publicar un comentario